10 de abril de 2013

10 DE ABRIL DÍA DE LA CIENCIA Y LA TÉCNICA : HOMENAJE A BERNARDO HOUSSAY

Nació el 10 de abril de 1887 en Buenos AiresFue un alumno prodigio que terminó el bachillerato a los 13 años. Cursó estudios en la universidad de su ciudad natal y se licenció en Farmacia en 1904 y en Medicina en 1911. Catedrático de fisiología de la Facultad de Medicina de Buenos Aires en 1919. 

Sus investigaciones descubrieron el papel que desempeñan las hormonas pituitarias en la regulación de los niveles de azúcar, o glucosaen la sangre. Extirpó fragmentos de glándula pituitaria en perros descubriendo que sin el lóbulo anterior de la glándula, los animales se volvían más sensibles a la insulina. Cuando se les inyectaba un extracto del lóbulo anterior, esa sensibilidad decrecía. Si a un animal que padecía diabetes se le administraban grandes dosis del extracto, su estado empeoraba y si se administraban grandes dosis a animales sanos, era posible inducir en ellos la enfermedad. 
  




Fue presidente de la Sociedad Argentina de Biología y de la Academia Nacional de Medicina de Buenos Aires. Por su oposición al nazismo, que apoyaba el gobierno argentino, fue destituido de su cargo universitario. Apoyado por la Fundación Rockefeller, fundó su propio instituto privado, el Instituto de Biología y Medicina Experimental, y fue nombrado catedrático Hitchcock de fisiología de la Universidad de California en 1948. 

Tras el exilio de Juan Domingo Perón en 1955, fue invitado a ocupar de nuevo su antiguo cargo. En 1958 creó el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET). Junto con Carl y Gerty Cori fue galardonado en 1947 con el Premio Nobel de Fisiología y Medicina, convirtiéndose en el primer premio Nobel sudamericano.  falleció en Buenos Aires el 21 de septiembre de 1971.

 En su homenaje desde el año 1982 cada 10 de abril  , se celebra el día de la ciencia y de la técnica.

27 de marzo de 2013

2 DE ABRIL: DÍA DE LOS VETERANOS Y CAÍDOS EN MALVINAS.



La historia es un poco larga de contar. Pero es aproximadamente así. Las Malvinas fueron descubiertas en 1520 por Esteban Gómez, un piloto español que integraba la expedición de Fernando de Magallanes.
Cuando en 1535 el rey de España Carlos I dividió sus dominios americanos, incluyó a las Malvinas dentro de los límites del Virreinato del Perú. Pero desde Lima, la capital del Perú, era muy difícil controlar lo que pasaba en el lejano Atlántico Sur. Y lo que pasaba era grave: piratas holandeses, ingleses y franceses merodeaban las islas y las costas patagónicas y desembarcaban en sus costas.
Los españoles protestaron enérgicamente ante estas ocupaciones. Y tan bien lo hicieron que en 1767 Francia reconoció la soberanía española sobre el archipiélago. Los ingleses opusieron mayor resistencia, pero finalmente abandonaron las islas en 1774. La Corona española no quedó satisfecha con estos desalojos y en 1776 creó el Virreinato del Río de la Plata. Su capital fue Buenos Aires, que estaba casi sobre el Atlántico y mucho más cerca de las Malvinas que la lejana Lima. 

 En 1816, la Argentina proclamó su Independencia de España. Y heredó del antiguo reino europeo la Patagonia y las islas Malvinas. Nuestro país ocupó las islas en 1820. Nombró entonces a un gobernador y estableció un penal para encerrar a presos muy peligrosos. En 1829 llegó el gobernador Luis María Vernet, quien fundó una población y prohibió la caza de focas. Al año siguiente, Vernet apresó un barco estadounidense que violó esa prohibición. Y los yanquis, en represalia, atacaron las islas, destruyeron todo lo que encontraron a su paso y luego se marcharon.

 LUIS MARÍA VERNET
En 1833, los ingleses aprovecharon la debilidad de las defensas de las islas para ocuparlas, arriar la bandera argentina y expulsar a sus habitantes. Entre ellos se encontraba el gaucho Antonio Rivero, quien encabezó la resistencia contra la ocupación colonial. Pero la sublevación fue vencida y Rivero y algunos de sus compañeros fueron tomados prisioneros y juzgados en Gran Bretaña.
Cuando esas noticias llegaron a la por entonces Confederación Argentina, Juan Manuel de Rosas y otros gobernadores argentinos de la época presentaron reclamos ante los diplomáticos británicos. Pero los invasores desoyeron esas protestas, fortificaron las islas y radicaron colonos que se quedaron allí y tuvieron hijos, nietos y bisnietos.

 Cuando finalizó la Segunda Guerra Mundial, en 1945, se inició la llamada descolonización, durante la cual las antiguas colonias europeas comenzaron a luchar para conquistar su Independencia.
Y a pesar de que el caso de las Malvinas era distinto, porque la población era de origen inglés y no deseaba independizarse, la diplomacia argentina logró que en varias oportunidades la Organización de las Naciones Unidas (ONU) condenara la ocupación británica. Paralelamente, hubo un acercamiento hacia los isleños: se establecieron vuelos comerciales entre las islas y el continente, se atendió a personas aquejadas de enfermedades graves en hospitales de nuestro país, etcétera. Esta política de acercamiento y seducción parecía estar empezando a dar frutos positivos cuando…

  
A principios de 1982 la última dictadura argentina se tambaleaba. Fue entonces que el presidente de facto, el general Leopoldo F. Galtieri, intentó un manotazo de ahogado: recuperar por la fuerza las islas Malvinas para de ese modo ganar el apoyo del pueblo y salvar el gobierno militar.
La operación de desembarco tuvo lugar el 2 de abril de 1982 y fue todo un éxito: las fuerza argentinas sorprendieron totalmente a las tropas británicas y tomaron control de las islas sin que prácticamente no hubiera enfrentamientos armados. Una gran parte de los argentinos festejó la recuperación y ocupó la Plaza de Mayo y las principales plazas del país para expresar su alegría. Galtieri respiraba aliviado. Todo parecía salir como lo había planeado. Todo, menos la reacción de la primera ministra británica:Margaret Thatcher. La llamada “Dama de Hierro” enfrentaba una dura oposición a su política económica neoliberal. Así que la ocupación le vino como anillo al dedo para unir a gran parte de los británicos tras la causa de la reparación del orgullo herido. Pronto partió de Londres una gran flota compuesta por más de 100 buques para recuperar las islas. Hubo agitadas negociaciones para evitar la guerra. Y cuando parecía que estas podían tener éxito, un submarino británico se topó con el crucero argentino General Belgrano. Consultado Londres, la orden de la Thatcher fue terminante: ¡hundan al Belgrano! Y el Belgrano se hundió, llevándose con él trescientas vidas argentinas y la posibilidad de preservar la paz.
Después vinieron los bombardeos para ablandar las posiciones argentinas y el desembarco de las fuerzas británicas, que en un mes y medio lograron acorralar en los alrededores de Puerto Argentino a las inexpertas tropas argentinas formadas por muchachos de 18 y 19 años. La rendición argentina, el 14 de junio de 1982, significó el fin de la dictadura. Galtieri renunció y la junta militar convocó a elecciones generales para el 30 de octubre de 1983. Esas elecciones fueron ganadas por el candidato de la UCR,Raúl Ricardo Alfonsín.

En la actualidad, las autoridades de nuestro país intentan restablecer las negociaciones con Gran Bretaña. Pero estas negociaciones están trabadas. Es que el recuerdo de la guerra está muy fresco todavía y los isleños no quieren saber nada con los argentinos. Habrá que esperar que el tiempo pase, que las heridas cicatricen y tal vez en futuro que nosotros no veamos las Malvinas vuelvan a ser argentinas.

19 de marzo de 2013

TOPONIMIA DE LAS ISLAS MALVINAS


La palabra Malvinas es una derivación de Malouines, nombre dado por el navegante francés Louis Antoine de Bougainville en 1764 en recuerdo del puerto de Saint-Malo en Francia. El nombre Falkland fue tomado del Falkland sound, que fue el nombre dado al estrecho de San Carlos, ubicado entre las dos islas principales. Este término fue acuñado por el navegante John Strong en honor a Anthony Cary, quinto vizconde Falkland, tesorero de la Real Armada Británica, extendiéndose a todo el archipiélago.
La denominación «islas Malvinas», tradicional en español, es la denominación usada en la documentación oficial de todos los países de habla hispana y portuguesa (Ilhas Malvinas). Es también la denominación usada en la declaración conjunta de los presidentes de los miembros de Mercosur, Bolivia y Chile en 1996, la Unión de Naciones Sudamericanas (UNASUR),la usada por la Asociación Latinoamericana de Integración (ALADI) en su declaración sobre la cuestión (2008), y la usada en la Cumbre Iberoamericana de 2007. Para la Organización de Estados Americanos (OEA) la denominación usada oficialmente en español es "Islas Malvinas" y en inglés "Malvinas Islands". En las Naciones Unidas, desde el 18 de marzo de 1966 la denominación usada en español es "Islas Malvinas (Falklands)" y en inglés "Falkland Islands (Malvinas)".